Escritores.
Los autores latinoamericanos no tienen nada que pedirles a los de otras regiones del mundo. Sus historias marcan una manera y una época distinta, su literatura es dueña de grandes relatos que se convierten en piezas esenciales para entender el contexto de cada país y aquello que los distingue del resto. Entre cada país, las expresiones cambian, los modismos se adaptan y las palabras se transforman. Nosotros, lectores, nos percatamos de lo que ocurre como testigos fieles que no tienen nada que decir, porque ellos, a través de sus historias, nos hacen conocer mundos que hasta ahora eran ajenos. La historia de su país también marca una parte en sus relatos y la manera en la que lo cuentan, reflejan un poco de su contexto.